2.8.07

Artistas unidos causando terror


Jamás se me había cruzado por la mente tener que algún día voltear mi cabeza con miradas de sospecha hacia agrupaciones de músicos en este país. !Pero así es!
Me acaban de linkear hacia una nota publicada recientemente por liberacióndigital.org y que nos alerta sobre un ridículo plan por parte de la directiva de la SCD.
Éste consiste en una iniciativa (que para colmo no es original de este organismo chileno) que busca conseguir dividendos a través de una tasa aplicada a diversos medios tecnológicos de grabación y reproducción, entiéndase discos duros, pendrives, reproductores MP3 portátiles y CD-R, etc, el cual iría a bolsillos de autores, editores, productores y artistas "en compensación por las copias que se hacen de sus trabajos".
Estamos de acuerdo: la piratería es vista hace rato como un flagelo que consiguió en muy corto tiempo ganarle terreno a los derechos de autor, con resultados que siguen siendo dramáticos para la industria no solo musical, sino que literaria y cinematográfica (y qué bueno!).
Por mi parte, sólo puedo decir al respecto que éste es un fenómeno que honestamente más me viene que me va; primero que todo, porque no me considero músico ni pretendo serlo tampoco, condición que inmediatamente me aleja de la realidad del artista que vive de la música que produce. Pero como segundo punto puedo decir que pese a lo anterior no puedo evitar reconocer cierta empatía con el tema ya que, como sea, participo desde hace ya varios años en este proceso de generar material musical, distribuirlo y cobrar entradas por mis recitales, que si bien es algo que entre otras cosas divierte, no es nada de fácil y jamás ganamos nada monetario tampoco con ello.
Aún así, contrario a esta lucha que sostienen los "músicos chilenos" por sobrevivir a su medio, estoy inmerso en un mundo tan pequeño que prefiero por convicción y también por conveniencia, refugiarme en la política del hazlo tú mismo y de la libre difusión de la música; hoy en día ya a ninguno nos sorprende mucho que hayan escuchado nuestra propia música en España, Perú, México o EEUU; incluso personas como el ex bajista de Black Flag llegó a escuchar unos temas que grabamos con la banda que teníamos con Bruno Battaglia (CostaRica), escribiéndonos además para dejarnos su impresión de lo que estábamos haciendo junto con dejar saludos y develar sus intenciones de visitar Chile algún día.
Entonces "apoyemos a la música en Chile y a sus artistas", muy de acuerdo, hagan lo que quieran para conseguirlo, pero una cosa es buscar y exigir apoyo; otra es la limosna y provocar en la gente lástima por sí mismos, pero otra muy distinta es que intenten meternos el dedo en la boca y se aprovechen de la manera como intentan hacerlo con esta propuesta barsa, ridícula e inviable por donde se le mire.
¿Por qué personas como Fernando Ubiergo, Denisse Malebrán y demás asociados tienen que quedarse con parte del dinero que yo invierto en cds vírgenes para hacer copias de los discos que produzco con mis bandas, o los que compro sencillamente para hacer respaldo de los archivos que guardo en mi pc?
Si quieres enterarte más al hueso de lo que estoy hablando, te invito a leer entonces el artículo de liberaciondigital.org sobre la SCD y su propuesta impositiva sobre medios tecnológicos.
*PG

2 comentarios:

Bruno Battaglia dijo...

los artistas no existen y menos eso llamado musica chilena

Anónimo dijo...

En las sabias palabras de The Ex, "La pirateria esta matando la industria musical... y ya era hora!"